La tabla del Jerusalén Celeste de la Iglesia de Villalgordo del Marquesado

             

En el lateral derecho de la iglesia, y al fondo de una hornacina, se encuentra una tabla que representa, el Jerusalén Celeste. Se trata de un bajorrelieve realizado con la técnica del estuco y policromado. Por su antigüedad se puede afirmar que procede de la antigua iglesia románica. Comparado con otras similares se puede deducir que estuviera ubicada en el antiguo retablo de la “iglesia vieja”.

Cristo de la Vera Cruz. Villalgordo del Marquesado

Representa una ciudad amurallada, bastante estilizada y de rasgos orientales, sobre ésta las imágenes del sol y la luna con rasgos humanos destacan en un cielo muy oscurecido. Sirve como fondo a la ubicación del Cristo de la Vera Cruz.

El Sol, la luna y el cielo oscurecido

La creencia de que tuvo lugar un eclipse de sol “milagroso” durante la agonía de la crucifixión fue una constante en la cultura cristiana, desde el periodo bizantino en adelante. Por ello se introdujo el sol y la luna en las escenas del Calvario, además del cielo oscurecido en una escena diurna.

La representación del sol y la luna ha tenido numerosas variantes: rostros masculinos o femeninos, cubiertos por velos, ocultos con otros elementos decorativos etc..

 También se ha considerado que los dos astros representarían la doble naturaleza de Cristo: la divina, el sol y la humana, la luna. Otro argumento afirma que la presencia del sol y la luna son la incorporación pagana al culto del cristianismo primitivo.

Jerusalén Celeste

La ciudad de Jerusalén se encuentra presente en el imaginario colectivo de toda la cristiandad medieval. Cuando es tomada por los musulmanes se organizan las cruzadas para recuperar la ciudad santa. En el mundo del arte se multiplican las representaciones de la ciudad cuna del cristianismo, sus muros, sus altos edificios, la abundancia de torres, pináculos etc. Jerusalén está muy presente en la literatura oral y escrita y también en las representaciones de arte religioso.

Calvario en Cuevas de Velasco. Fotografía de Raul Contreras.

La idea del Jerusalén Celeste procede de la tradición judía. Cada vez que el Templo de Jerusalén era destruido, la réplica terrena de la Casa de Dios desaparecía, pero su reflejo celestial era indestructible. Según el profeta Ezequiel, la Jerusalén celestial era eterna y volvería a tomar forma física en una ciudad terrena en el antiguo lugar sagrado. Esta nueva Jerusalén es la utopía, la ciudad ideal donde se ubicaría paraíso terrenal.

En otras localidades también se pueden encontrar ejemplos, el más próximo se encuentra en Cuevas de Velasco (Cuenca), en La Rioja, Soria o Vizcaya.

Crucifijo Sol Luna de Tajueco (Soria)
Zalla (Vizcaya) Ermita de San Pedro Zarikete
Najera

Referencias

  • Labrador, I. y Medianero, J. (2004) Iconología del Sol y la Luna en las representaciones de Cristo en la cruz. Laboratorio de Arte, 17. pp 17-34. 2004
  • HERNÁNDEZ PÉREZ, Azucena (2016): «Eclipses», Base de datos digital de Iconografía Medieval. Universidad Complutense de Madrid. En línea: https://www.ucm.es/bdiconografiamedieval/eclipses
  • Le Goff, J. (2009) Una edad media en imágenes. Barcelona: Paidós

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s